Scracht

Ya he finalizado el MOOC de Coursera ¡A programar! que os recomiendo sin dudar. Un MOOC que nos ha acercado a la herramienta de Scracht. Me ha gustado especialmente la forma en la que se nos introduce en la lógica del programa y su estrecha vinculación con otros lenguajes de programación.
Contenidos acertados y actividades significativas que buscan facilitar el uso de la herramienta y evitan el autobombo y la autocomplacencia que encontramos en otros MOOC.
Si tenéis ocasión no dejéis de hacer este estupendo MOOC de Coursera.
Os dejo algunas de las prácticas que he realizado en el mismo:

•  Lleva el pajarito a la pajarera

Manejo de flechas direccionalidad para ayudar al pajarito a llegar a la pajarera.
Juego ideado para ed. infantil. Para empezar haz clic en la bandera verde.


    

• Dibujar polígonos. 

El personaje dibuja polígonos a petición del usuario y a continuación se informa de su nombre. Para empezar clic en la bandera verde.

• Juega a barrer zombies.

Juega con la escoba a barrer  zombies o conviértete en una dulce princesa armada con un plumero que limpiará de zombies su reino. Para cambiar la escoba por la princesa solo tienes que pulsar la barra espaciadora. Si los zombies llegan a la casa o a palacio finalizará el juego. Ánimo y no dejes que los zombies se apoderen de tu mundo.

• Ayuda a Cody a llegar a su casa.

Utiliza las flechas de direccionalidad. Podrás conocer el tiempo que inviertes, el número de meteoritos con los que choca la nave y ajustar la velocidad de aparición de los mismos. El juego termina cuando la nave llega al planeta. Incluye un botón de reinicio que te devuelve a la pantalla inicial. Para jugar deberás hacer clic en la bandera verde.

Cómo aplicar el pensamiento científico

A lo largo del curso hemos llevado a cabo una reflexión sobre el concepto de verdad absoluta en contraposición a lo que se considera verdad científica.

Verdad y Contexto

La verdad está condicionada por el contexto, por el lenguaje, por el individuo que elabora la idea y por el que la recibe y ello nos ha hecho profundizar en el concepto de verdad que manejamos. La idea de verdad siempre está determinada por el contexto de la sociedad y cultura en la que se formula. Este planteamiento nos ha hecho entender de forma muy clara cómo la verdad cotidiana es manipulada de diversas formas, con diversos fines y desde distintos estamentos. En nuestro día a día vemos cómo un simple tono de voz, una verdad a medias, un comentario velado, incluso los gestos influyen en la percepción de la verdad.

¿Está presente la ciencia en nuestro día a día?

El pensamiento científico en nuestro día a día

El ser humano necesita de cotidianidad y de rutina para sentirse seguro ante el mundo y para poder afrontar sin angustia los problemas del día a día. Esta forma de enfrentarse a la vida ordena en cierto modo su mente, pero también hace que día tras día se reproduzcan involuntariamente modelos de vida (de comportamiento, de alimentación, de consumo…) que quizás no sean los mejores o los más adecuados. 

Debemos buscar el equilibrio entre la seguridad que aporta la rutina y la búsqueda constante de la verdad, entendiendo ésta como exploración para encontrar la mejor solución,  la mejor opción ante las dificultades del día a día. Esta búsqueda de equilibrio no puede ser afrontada sin un ingrediente fundamental: la creatividad.

 A lo largo de los años se ha negado esta característica al pensamiento científico pero es evidente que sin ella, sin su inspiración los científicos carecerían del motor necesario para descubrir nuevos modelos, nuevos paradigmas, nuevas verdades… y sus trabajos caerían en una repetición que les alejaría de su objetivo final. 

Repetir los mismos métodos conduce siempre a los mismos resultados, por ello es imprescindible afrontar esta búsqueda desde planteamientos innovadores y originales.

La verdad en la ciencia

Una reflexión sobre el concepto de verdad científica nos lleva a aceptar que no existe el concepto de verdad absoluta.
 

La percepción de la  ambigüedad que acompaña siempre a la verdad nos influye como individuos también en nuestro día a día. La verdad está condicionada por el contexto, por el lenguaje, por el individuo que elabora la idea y por el que la recibe, sociedad y cultura la determinan.

Sabemos que la verdad cotidiana puede ser manipulada de diversas formas. Un simple tono de voz, una verdad a medias, un comentario velado… Todos estos aspectos pueden modificarla fácilmente.